Las cochinas es una serie de autorretratos caracterizados por la metáfora y la sugestión de figuras incompletas, sin develar aún.
En “la vertical”, da la sensación de un orden trastocado (o invertido) donde el mundo natural aparece bajo una mirada onírica, un tanto surrealista
“La cochina puso un huevo” alude al TEMA de su obra, el peso del mandato, el intermedio o el “ENTRE” que va de la transgresión al condicionamiento del rol. Las figuras animales surgen como estigma (Cara de chancho) o anhelo de redención (Pájaros, acaso cisnes)
La paleta que utiliza es casi primaria, de un vibrante colorido simbólico.